
4 huevos cocidos.
1 pimiento amarillo y otro rojo.
1 cebolla.
1 diente de ajo.
1 tomate grande.
queso para gratinar.
perejil, orégano, sal, pimienta negra molida.
aceite de ove.
1 huevo.
1 cucharada sopera de harina de trigo.
Un chorrito de leche.
Cocer los huevos en agua y sal unos 12′, pelar y cortar por la mitad.
Pelar y picar la cebolla y el ajo en cubitos. Sofreír en una cazuela con un fondo de aceite caliente y una pizca de sal.
Añadir los pimientos, lavados y cortados en daditos.
Mientras se sofríen, echar en un cuenco el huevo y batirlo.
Agregar la leche, la harina, sal, la pimienta negra molida y batir con varillas para que no salgan grumos.
Echar esta mezcla en la cazuela y sobre ella, queso, el tomate lavado y cortado en rodajas con una pizca de sal y orégano.
Colocar encima los huevos, rociar con queso y un poquito de sal, pimienta y perejil.
Tapar y dejar cocinar unos 20′. ¡Pura delicia!