1 lámina de hojaldre.
7 rodajas de solomillo ibérico, grosor medio.
1 tarrina de paté.
1 cebolla .
azúcar moreno al gusto.
1 huevo.
1 chorrito de aceite de ove.
sal y pimienta negra molida.
Precalentar el horno a 190ºC.
Pelar y trocear la cebolla en juliana.
Calentar el aceite en una sartén y sofreír a fuego lento.
Revolver de vez en cuando. Antes de finalizar, echar el azúcar y esperar que se derrita. Reservar.
Extender el hojaldre y cortar 14 círculos con un aro de cocina de unos 9 cm.
Colocar 7 sobre la bandeja de horno con papel sulfurizado.
Sobre ellas, una rodaja de solomillo salpimentada, un poquito de cebolla caramelizada y un trocito de paté.
Tapar con los 7 círculos restantes y sellar los bordes con un tenedor.
Pintar con el huevo batido y hornear unos 12′ con calor arriba y abajo. ¡Pura gula!