2 muslos de pavo hermosos.
1 cucharada sopera de salsa de soja.
1 cucharada sopera de pimentón dulce.
2 cucharadas soperas de aceite de ove.
sal. pimienta negra molida.
1 copa de cava.
1 copa de coñac.
Precalentar el horno a 180ºC
Con la ayuda de una jeringuila, inyectar el coñac en los muslos de pavo.
Mezclar en un bol la soja, el pimentón y el aceite.
Salpimentar los muslos y pintar con la mezcla anterior.
Colocar los muslos en una fuente refractaria, regar con el cava y hornear unos 35′.
Servir acompañados de patatas, puerro y pimientos rojos confitados. ¡De muerte!