1oo ml de agua.
50 ml de aceite de ove.
13 g de harina.
1 pizca de sal.
Echar lo ingredientes en un cuenco y mezclar muy bien con las varillas.
Separar 2 cucharadas soperas en otro bol y agregar unas gotas del colorante deseado.
Calentar una sartén un poco y verter el contenido del bol, no mover. Mantener a fuego medio.
Cuando el agua se evapore y el aceite se desprenda, veremos una masa calada que se despegará de la sartén con facilidad.
Sacar y poner sobre un plato con papel absorbente.
Decorar el plato deseado y comer hasta el adorno.