5 cogollos de lechuga.
2 latas de anchoas en aceite de oliva.
6 dientes de ajo.
aceite de ove.
sal.
vinagre de manzana.
Si los cogollos son muy grandes, partir en 4 trozos longitudinales. Si son pequeños, solo por la mitad. Echarlos en un bol con bastante agua y un chorreón de vinagre para que suelten todas las impurezas. Una vez limpios, colocar en una fuente y rociar con vinagre.
Extender sobre ellos una capa de anchoas.
Pelar, laminar los ajos y freír en abundante aceite. Verter por encima de los cogollos. ¡Entrante riquísimo!